¿El Pecado es lo Opuesto a nuestro Señor Dios?

¿Qué significa Pecar? ¿Es solo hacer cosas malas o también pensar cosas malas? ¿Cómo podemos evitar el pecado y vivir de una manera que agrade a Dios?

En este artículo, vamos a explorar lo que la Biblia dice sobre el pecado y cómo podemos superarlo con la ayuda de Dios.

El Pecado es lo opuesto a Dios. Dios es santo, justo, bueno y amoroso. Todo lo que hace y todo lo que creó refleja su carácter perfecto. El Salmo 111:7 dice: “Lo que él hace es justo y verdadero”. El Salmo 145:9 dice: “El Señor es bueno para con todos, y con ternura cuida sus obras”. Y 1 Timoteo 4:4 dice: “todo lo que Dios ha creado es bueno”.

Pero cuando nosotros hacemos o pensamos algo que va en contra de la voluntad de Dios, eso es pecado. El pecado es desobedecer a Dios, rebelarnos contra él, ignorarlo o rechazarlo. El pecado nos aleja de Dios y nos daña a nosotros mismos y a los demás.

Por ejemplo, Dios creó el sexo como una expresión de amor y unión entre un hombre y una mujer casados. Pero cuando usamos el sexo fuera del matrimonio o de una manera egoísta o perversa, eso es pecado. Dios creó el dinero como un medio para satisfacer nuestras necesidades y las de los demás. Pero cuando usamos el dinero para ser codiciosos, corruptos o egoístas, eso es pecado.

Todos hemos pecado y estamos lejos de la gloria de Dios (Romanos 3:23). No podemos ser perfectos como Dios ni cumplir sus mandamientos por nuestra propia fuerza. Necesitamos la ayuda de Dios para vencer el pecado y vivir una vida santa.

Dios nos ama tanto que envió a su Hijo Jesucristo a morir por nuestros pecados en la cruz. Jesús pagó el precio por nuestro pecado y nos reconcilió con Dios. Si creemos en él y lo aceptamos como nuestro Señor y Salvador, recibimos el perdón de nuestros pecados y la vida eterna con Dios (Juan 3:16).

Pero eso no significa que ya no tenemos que luchar contra el pecado. Aún vivimos en un mundo caído y tenemos una naturaleza pecaminosa que nos tienta a hacer lo malo. Por eso necesitamos seguir creciendo en nuestra relación con Dios y renovar nuestra mente con su Palabra.

La Biblia es la guía que Dios nos ha dado para saber qué es bueno y qué es malo. La Biblia nos enseña los principios de Dios para vivir una vida que le honre y le glorifique. La Biblia también nos muestra el ejemplo de Jesús, quien fue tentado en todo como nosotros pero sin pecado (Hebreos 4:15).

Si queremos ser más como Jesús, tenemos que leer la Biblia, meditar en ella y aplicarla a nuestra vida diaria. Tenemos que orar a Dios y pedirle su ayuda para resistir al diablo y huir del mal (Santiago 4:7). Tenemos que confesar nuestros pecados a Dios cuando caemos y recibir su gracia para levantarnos (1 Juan 1:9). Tenemos que buscar la comunión con otros cristianos que nos animen, nos corrijan y nos apoyen en nuestro caminar con Dios (Hebreos 10:24-25).

El pecado es lo opuesto a Dios, pero Dios nos ha dado el poder para vencerlo. No estamos solos en esta batalla. Tenemos a Dios de nuestro lado, que nos ama, nos perdona y nos transforma. Vivamos cada día para su gloria y su honra.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *