Estudió la Biblia para negar Dios pero hoy Predica
Estudió la Biblia para negar la existencia de Dios pero hoy predica que «no hay nada fuera de Jesús»
¿Qué lleva a una persona a cambiar radicalmente su forma de pensar y de vivir? ¿Qué puede hacer que alguien que se dedicaba a refutar la Biblia y a rechazar a Dios se convierta en un apasionado predicador del evangelio? Esa es la historia de Nate Stafford, un joven empresario que encontró el verdadero sentido de su vida en Jesucristo.
Nate Stafford creció en una familia cristiana, pero desde muy joven se alejó de la fe debido a las dificultades que enfrentó. Se sintió decepcionado de Dios y de la iglesia, y decidió buscar la felicidad en el mundo. Se involucró en el consumo de drogas, el alcohol, las fiestas y el sexo. También se dedicó a los negocios y logró tener éxito financiero. Sin embargo, nada de eso llenaba el vacío que sentía en su corazón.
Un día, su novia lo dejó y él se quedó sin rumbo. Decidió irse a vivir con su hermana, quien había tenido una experiencia sobrenatural con Dios. Ella había sido sanada milagrosamente de una enfermedad y se había convertido al cristianismo junto con su esposo. Nate no podía creer lo que le contaban, y pensaba que estaban equivocados.
Para demostrarles que estaban siguiendo una mentira, Nate empezó a estudiar la Biblia con el propósito de encontrar contradicciones y errores. Sin embargo, mientras más leía y más investigaba, más se daba cuenta de que la Biblia era un libro veraz y confiable. También descubrió que había muchas evidencias históricas, científicas y arqueológicas que respaldaban la existencia de Dios y la veracidad del cristianismo.
Lo que más le impactó fue conocer la persona de Jesucristo. Nate se dio cuenta de que Jesús era el Hijo de Dios hecho hombre, que había vivido una vida perfecta y sin pecado, que había muerto en la cruz por los pecados del mundo y que había resucitado al tercer día. Nate entendió que Jesús era el único camino para tener una relación con Dios y para recibir el perdón y la salvación.
Nate no pudo resistirse al amor de Dios y decidió entregarle su vida a Jesús. En ese momento, sintió una paz y una alegría que nunca había experimentado antes. Su vida cambió por completo. Dejó sus vicios, sus malos hábitos y sus ambiciones mundanas. Empezó a leer la Biblia con devoción, a orar con fervor y a asistir a una iglesia donde creció en su fe.
Nate también sintió el llamado de Dios a compartir el evangelio con otros. Comenzó a predicar en las calles, en las redes sociales y en donde fuera que tuviera la oportunidad. Su testimonio ha impactado a muchas personas que han escuchado su historia y han conocido el amor de Dios.
Hoy en día, Nate es un hombre feliz y lleno del Espíritu Santo. Su pasión es servir a Dios y hacer su voluntad. Su lema es: «No hay nada fuera de Jesús». Él sabe que solo en Jesús hay vida abundante y eterna.
